Cetrería robótica y combate de incendios entre los trabajos de drones de Holguín

The content originally appeared on: OnCuba News

Combatir incendios, evaluar sistemas de riego, calcular el volumen de las minas, así como la llamada cetrería robótica son, entre otros, los servicios que presta la empresa Geocuba Oriente Norte, de Holguín, por medio de su flota de drones.

Una de sus más recientes prestaciones fue internar un dron en la zona de un incendio en Mina Martí, un agreste paraje de la Meseta de Mayarí, en el centroeste holguinero, según reseña un reportaje del periódico Granma.  

“Gracias al dron y a la cámara que posee fue posible transmitir, a las brigadas de bomberos y guardabosques, la dirección en la que avanzaba el fuego y los lugares por los cuales se podía entrar para combatirlo”, explicó al medio Rolando Suárez Góngora, quien maneja el vehículo aéreo no tripulado.

Volumen de las minas

Igualmente, la empresa holguinera ha calculado el volumen de las minas de la Empresa de Níquel Ernesto Che Guevara, ubicada al norte del yacimiento mineral de Punta Gorda, en Holguín.

“Antes, cuando no disponíamos de vehículos aéreos no tripulados, en cualquier tarea relacionada con un levantamiento en esas zonas con relieve abrupto, una comisión de trabajo de unas cuatro personas demoraba hasta una semana, tras lo cual se debían procesar los datos”, contó Suárez Góngora.

Ahora, la irrupción de la tecnología aminoró los tiempos espectacularmente y economizó la fuerza de trabajo.

“Hoy, una persona con un dron puede hacer un levantamiento en una jornada; los datos obtenidos se introducen en computadoras y estas realizan los cálculos de forma rápida y con absoluta confiabilidad”, explicó el experto.

A partir de 2016, Geocuba Oriente Norte comenzó el uso de drones. Ello fue posible gracias a una transferencia de tecnología realizada por una entidad científica del Grupo Empresarial Geocuba, el cual dispone de un sólido sistema de ciencia e innovación.

El primer proyecto de carácter nacional, realizado con otras empresas del Grupo, resultó la creación de la cartografía para el Catastro Urbano. A ello le ha seguido su actualización sistemática en las provincias de Las Tunas y Holguín, precisó el ingeniero Enrique Pedro Villafruela, director de Ingeniería y Comunicaciones de la empresa.

Drones para la agricultura

Los primeros servicios de los drones holguineros evaluaron obras asociadas a la agricultura a partir del agua del trasvase Este Oeste. Ello permitió mayor precisión y eficiencia en los sistemas de riego ensamblados.

“A medida que se iban instalando las máquinas de riego, comprobaban si las áreas que cubrían estaban bien sembradas, lo que tenía en cuenta la población de los cultivos. Los resultados de las observaciones fueron la base de informes para análisis importantes”, contó Villafruela. 

Fertilizando desde el aire: drones sobre frijoles en Pinar del Río

La industria del níquel ha sido otro sector que ha empleado drones para la gestión empresarial, comenzando por una cartografía especializada escala de 1 en 100, y 1 en 500, para la ubicación de algunas presas de cola de la fábrica Pedro Soto Alba.

“A partir de ese momento, nos hemos extendido a otros servicios, como son los levantamientos y la modelación para la ejecución de caminos mineros, cálculos de volumen en yacimientos y monitoreos de diferentes tipos de procesos que se realizan en las entidades del ramo”, desmenuzó el ingeniero astrónomo-geodesta.

Videos para el turismo y cetrería robótica

Los vehículos aéreos no tripulados de la empresa Geocuba Oriente Norte no han sufrido accidentes en ocho años de explotación, de acuerdo con Granma.

Desde hace tiempo se emplean en el sector turístico en la realización de videos promocionales y el levantamiento y seguimiento de obras, entre otras ocupaciones.

También han ampliado las contrataciones al servicio de inspección de las líneas eléctricas de alta tensión.

“Las máquinas voladoras pueden sustituir a las personas que durante largo periodo han verificado a pie el estado de las áreas y las estructuras, como paso previo a la planificación y realización de los mantenimientos”, explicó el director de Ingeniería y Comunicaciones de la empresa.

Una de las extensiones más útiles es el servicio, desde febrero, de la llamada cetrería robótica en el aeropuerto internacional Frank País García, de Holguín. Se trata de la sexta terminal aérea que emplea la tecnología para contrarrestar el peligro que representan las aves durante los despegues y aterrizajes de las aeronaves.

En este caso el dron, de gran porte, posee un revestimiento que mimetiza a un ave de rapiña. Además, emite un sonido modelado, que atrae, por ejemplo, a las auras (tiñosas), que se le acercan y lo siguen.

“El aeropuerto contrató a otro suministrador un estudio previo que identifica, por temporadas, el tipo de ave que hay en la zona, sus rutas y compor­tamiento”, detalló Villafruela al respecto. 

El dron en cuestión está equipado con un software especializado que gestiona las actividades para alejar las aves con un término de alrededor de 50 minutos de vuelo. Este es el “tiempo que se le da para establecer los márgenes de seguridad que se requieren”, puntualizó el especialista.

Etiquetas: ciencia en CubaHolguíntecnología