La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) busca modernizar los servicios veterinarios asociados al ganado menor en Cuba.
En la iniciativa participan el Ministerio cubano de Agricultura, la FAO y la Unión Europea, con el propósito de revitalizar labores de asistencia técnica que permitan mejorar la productividad y la salud de los animales de cara a la sostenibilidad y el crecimiento del sector, dio a conocer un despacho de la agencia Prensa Latina.
Según la FAO, se verifican avances relativos a las capacidades cubanas para el diagnóstico clínico y gestacional del ganado menor.
Esos avances están sustentados en la provisión de equipos de cirugía y obstetricia menor, ultrasonidos móviles y rayos X, instrumental quirúrgico y kit de inseminación artificial, entre otros medios.
Igualmente, la iniciativa de salud animal adquirió medicamentos antibióticos y antiparasitarios de uso veterinario para el enfrentamiento de enfermedades de alto impacto en el ganado menor.
Seis municipios de las provincias de Villa Clara y Sancti Spíritus son los escenarios para la implementación del proyecto,muy bien valorado por directivos y expertos de ambos territorios ante la expectativa de aumentar la masa ovino-caprina y prevenir riesgos sanitarios, suscribió el informe de PL.
De manera general, el plan ayuda a extender buenas prácticas en el manejo, la reproducción y alimentación anima, mediante un programa específico de capacitación, aseguró la FAO.
Cuba importa cada año ingentes cantidades de alimentos y las familias gastan más del 70 % de sus ingresos en comprar comida, de acuerdo con el periódico oficial Granma.
Los cubanos gastan más del 70 % de sus ingresos en comprar alimentos, según datos oficiales
Esta tasa refleja, entre otras cosas, el fuerte encarecimiento que han experimentado los alimentos durante los últimos años debido a un conjunto de factores que van desde las ineficiencias no superadas en décadas hasta las sanciones de Estados Unidos.
Según Naciones Unidas, Cuba importa el 80 % de lo que consume. Un país donde solo el 15 % de la población reside en zonas rurales.
Además, el desabastecimiento de productos básicos en el mercado formal ha disparado los precios en el informal, a lo que ha contribuido el derrumbe del peso y la llegada de las pequeñas empresas privadas que adquieren productos en los mercados internacionales con divisas.
Digitalización de áreas rurales
A fines del pasado mes, la FAO reveló el establecimiento de una alianza para impulsar la digitalización de áreas rurales en Cuba.
En la iniciativa participan la Fundación Universitaria de Innovación y Desarrollo de la Universidad de La Habana (Fundación UH) y la FAO con el respaldo del fondo fiduciario de cooperación Sur-Sur de la organización y China, explicó el organismo de Naciones Unidas en un comunicado.
El propósito, agregó la agencia de la ONU, es ampliar el acceso a las herramientas digitales, así como su uso en los sistemas agroalimentarios y los territorios rurales. Esto debe ayudar a las comunidades a mejorar la promoción y venta de sus servicios turísticos, elevar ingresos propios y generar empleos.
Por su parte, la Fundación UH anunció que los talleres continuarán durante los próximos tres meses para compartir buenas prácticas en el diseño de estrategias de digitalización y comercio electrónico en apoyo a agricultores familiares.
Las acciones iniciales (plan piloto) transcurrirán en la Finca Agroecológica Vista Hermosa, ubicada en el municipio capitalino de Guanabacoa, y en otras cuatro comunidades de Ciénaga de Zapata, en Matanzas, y Jobo Rosado en Sancti Spíritus.
De acuerdo con la FAO, el esfuerzo tiene carácter regional y busca transformar los medios de vida rurales y los sistemas agroalimentarios de 12 países: Argentina, Barbados, Chile, Costa Rica, Cuba, Guyana, Jamaica, México, Panamá, Surinam, Trinidad y Tobago y Uruguay, precisó el informe reproducido por el servicio de prensa de la Cancillería cubana.
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