Lo que algunos temieron que podría ocurrir, ocurrió.
Uno de los tanques cisterna descarrilados el pasado sábado en Sancti Spíritus derramó parte del petróleo que almacenaba y el crudo llegó hasta uno de los afluentes del cercano Río Zaza, el curso fluvial más importante del centro de Cuba.
No obstante, autoridades del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) aseguraron este miércoles que el vertimiento “no fue significativo” y está “bajo control”, al tiempo que se “evalúan alternativas” para solucionar totalmente “la afectación”.
Según reseña el periódico Escambray, el derrame se produjo dos días después del descarrilamiento, por “la tapa de uno de los tanques volcados que mantiene un nivel de combustible luego de la extracción realizada por una brigada especializada de Cupet”.
Tras detectarse, desde este martes comenzaron a ejecutarse acciones de contención por fuerzas especializadas y soldados, lo que permitió que el derrame se encuentre controlado, de acuerdo con Leonel Díaz Camero, delegado del Citma en Sancti Spíritus.
“Se logró contener el vertimiento en el curso acuático, que es un afluente del rio Zaza, en tanto se ha trabajado también en la parte terrestre por donde se movió el derrame para, en el lapso de unos tres días, dejar solucionada la afectación en esa área”, detalló el directivo.
Evaluación de soluciones
Díaz Camero comentó al medio local que, a raíz del derrame de petróleo, autoridades y expertos “han estado evaluando varias soluciones para la limpieza del curso superficial de agua, a partir de que el relieve de la zona es muy irregular y no hay accesos”.
Estos factores, dijo, “conspiran mucho contra el empleo de tecnología mecanizada”.
Por ello, explicó, “se evalúan las alternativas de construir un posible acceso vial hasta la cercanía del arroyo, de manera que se pueda entrar hasta allí con equipamiento especializado para recoger el crudo de la superficie o, la quema del crudo que está en esa superficie acuática, con las correspondientes medidas que eso llevaría”.
A pesar de las dificultades operativas para solucionar completamente la situación, el delegado del Citma enfatizó en que lo sucedido no ha tenido un impacto negativo en el medioambiente “hasta el momento”.
“Lo principal es que el derrame del martes está totalmente bajo control, no fue significativo, ni por la cantidad, ni por el impacto, y la biodiversidad no se ha visto afectada. Hemos revisado la zona y, hasta el momento, no hay ningún daño ambiental”, aseveró.
Según Díaz Camero, este jueves “se actuará en el curso superficial”.
“El peligro que existía se contuvo con las acciones acometidas desde el propio martes, con un primer tranque en el arroyo”, dijo y añadió que un día después “se realizó otro con un fundamento más técnico por fuerzas de Aprovechamiento Hidráulico”.
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En tierra
Sobre el crudo vertido en tierra, Mijail Bonachea Crespo, director de la refinería Sergio Soto, de Cabaiguán, informó a Escambray que “todo el suelo impactado se recogerá para llevarlo a la industria a un área de bioremediación, donde existe una bacteria que convierte los hidrocarburos en un periodo de tres meses y así subsanar el suelo afectado”.
El propio directivo ofreció más detalles sobre la ocurrencia del derrame.
Según comentó, debido a la inclinación de uno de los tanques “no fue posible succionar todo el combustible, le quedó un volumen y es el tanque que se derramó por un registro”.
Además dijo que, según se reconoció en el lugar, “a la tapa se le extrajeron tornillos”.
El reporte de prensa no especifica al respecto.
El domingo, el propio Bonachea Crespo había reconocido la existencia de “un pequeño derrame por las tapas”, ya que al “virarse el carro se partieron algunos tornillos”. Pero, en ese momento afirmó que se habían puesto tornillos nuevos “inmediatamente” y que “se reapretaron todas las tapas para evitar que el producto se derramara”.
También este miércoles, de acuerdo con Escambray, se completaron los trabajos finales de reparación de la vía férrea. Gracias a ello, se anunció “el restablecimiento de la circulación por la Línea central, con medidas de precaución en la velocidad hasta tanto se terminen las labores para devolver a la vía todos los parámetros técnicos requeridos”.
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